Por: Juan Rosi
La inseguridad que han planificado para nuestro país, sin dudas que constituye "una nueva Guerra", esto fue planificado por los Ingleses y por los enemigos de Cristo, es un odio ciego precisamente al hispanocatólicismo, mientras nosotros nos entretenemos con horas de televisión donde nos muestran la muerte de un degenerado como Ricardo Fort, como si fuera el hombre del año, pero en realidad esto tiene un significado: es precisamente el antimodelo de la virilidad, del hombre con valores, es el hombre híbrido, inficionado por una cultura marginal, un nihilismo realmente lacerante. Lo lamentable es que aquellos que sostenemos los principios que fueron fundadores de nuestra patria, estamos tan fragmentados que es imposible producir una reacción para enfrentar a la disolución de la Patria. Realmente estamos viviendo cuestiones extremadamente peligrosas, estamos asistiendo a un "verdadero genocidio" del pueblo nativo para ser reemplazados por otras etnias y de esa manera la Argentina sería una cuestión pasada en el tiempo, un simple recuerdo de algo que queríamos ser y no supimos ser. Los medios de comunicaciones son los que ejercen la "Acción psicológica" en esta guerra, para llevar al pueblo a un confusionismo, precisamente por lo basal que es la educación y que no nos permite ver lo esencial y solo podemos analizar lo accidental, lo contingente, mientras los verdaderos enemigos saben donde pegar y como pegar. Sin dudas, que lo primero y fundamental que tuvieron que destruir fue nuestro idioma, desde la educación con teorías que luego se transformaron en métodos como el constructivo piaggetiano, como la psicogenesis, cosa que lograron, ya nuestro idioma no es el mismo que hace 30 años atrás, hemos incorporado como vocabulario corriente una batería de malas palabras que es lenguaje común que hoy manejamos, los medios también muestran esto como algo normal, los Mauro Viale (Mauricio Goldfar) los Marcelo Araujo (otro de la misma creencia) los Tinelli, etc. etc. Todos estos enemigos de nuestra cultura grecoromanicahispanocatólica. Nuestros niños han aprendido con estos métodos, y fueron victimas de esta nueva guerra, para eso como dijera mas arriba, atacaron la palabra y la destruyeron, recordemos que la palabra es de orden sagrado y no un simple juego de niños, si destruyeron las palabras, destruyeron los conceptos, si se destruyen los conceptos se destruyen los estilos de vida, cosa que han ido consolidando a través de los sucesivos gobiernos en estros 30 años de democracia, por eso lo que era anormal hoy ya no lo es, por el contrario, y lo anormal, lo antinatural se estableció como moneda corriente, el granscismo fue el modelo ideológico en esta nueva guerra. Los políticos que son verdaderos enemigos del pueblo y que solo lo utilizan para tratar de legitimar la disolución que promueven, son la improvisación mas irresponsable, no existe plan de gobierno, no existen planes estratégicos, no existe en verdad un proyecto de nación. Sin dudas que tendríamos que escribir un rato largo para poder seguir enumerando hechos que nos llevan a la "disolución nacional", pero a los efectos de que sea leído este artículo traté de ser sintético y sin duda que seguiré escribiendo para que todo el pueblo Argentino sepa donde estamos parados.
Hay que tomar en cuenta que en la "conformación" de la identidad nacional argentina actual, participa 2 factores que casi nadie ha mencionado: el peimero, que Argentina es, después de Israel, el segundo país en el mundo con mayor número de población judaica; y en segundo lugar, que gran parte de la inmigración italiana, francesa, española e inglesa de finales del siglo XIX y prinicpios del XX fueron personas anarquistas, comunistas, socialistas, etc., es decir, gente irreligiosa.
ResponderEliminarAsí mismo, por eso estamos como estamos y no creo que haya salida humana para ninguna restauración.
ResponderEliminar