jueves, 20 de febrero de 2025

20 DE FEBRERO 1813. BATALLA DE SALTA. POLÍTICA Y RELIGIÓN. Por: Damián Descalzo.


En un nuevo aniversario de la gloriosa victoria de Salta, donde las tropas patriotas conducidas por el General Belgrano, obtuvieron un nuevo paso hacia la Independencia nacional, vale recordar un hecho que mantiene vigencia. Luego de la victoria de Suipacha en 1810, el sentimiento antirreligioso de algunos jefes y oficiales de nuestro ejército había generado, como no podía de ser otra manera, un profundo rechazo en el territorio de las actuales provincias del NOA y en el Alto Perú (hoy, Bolivia). Ya en los albores de nuestra Independencia, los imbuidos del anticlericalismo iluminista (antecesores del liberalismo progresista individualista que, hoy en día, postula descartar vidas en nombre de su "deseo" egoísta y hedonista) que se mofaban de las creencias de nuestro pueblo, perjudicaron fuertemente al país. Eso nos llevó a la humillante derrota de Huaqui. No respetar la fe de un pueblo siempre lleva a la derrota. Todo cambió cuando Belgrano fue a la zona. Hizo celebrar Misas, ofreció reverencias a las imágenes cristianas y entregó escapularios a los soldados. El general Belgrano, además de ser un creyente genuino, era un hombre de gran sabiduría que poseía una aguda inteligencia política y un profundo conocimiento de los habitantes de nuestra tierra. Comprendió que alejarse de los sentimientos puros y piadosos de nuestro pueblo, complicaba la causa de la Independencia. Tenía muy claro que las creencias religiosas son fundamentales en política. En los valores cristianos está el basamento espiritual en que debe inspirarse nuestra Patria, para fortalecer su identidad, afianzar la Independencia y alcanzar el orden social justo que merece nuestro pueblo.

jueves, 6 de febrero de 2025

POR LO VISTO EL PRESIDENTE DE LOS EE.UU. TERMINÓ SIENDO UN ULTRA FEMINISTA ...: Trump firma orden que excluye a hombres de deportes femeninos

RADICALIZACION Y POLARIZACION. MILEI Y LOS KK MANTIENEN EL MISMO LENGUAJE Y SIMPLEMENTE PIENSAN EN EL PODER PERO JAMÁS EN EL BIEN COMÚN DE LOS ARGENTINOS.

 

Por: Nito Sosa

La marcha del día sábado del LGTB, dejó muchas aristas para analizar y también podemos concluir que las usinas ideológicas quieren exprimir a los argentinos, hasta su última gota de sangre.
El Poder que subyace y que verdaderamente gobierna a la Argentina, experimentó con la marcha de lo que constituyen apenas una ínfima minoría de degenerados, pero que sus desviaciones son partes de esa guerra cultural que vienen desarrollando sobre nuestra Patria y que quieren llevar a la perversión al resto de la sociedad, por eso y para asegurarse la ejecución de sus siniestros planes, han instrumentado lo que denominamos "la alternancia dirigida", es decir: es Milei o son los kk. Antes el enojo de unos, marcará la llegada del otro, mientras tantos ellos se aseguran el desguace y la disolución nacional.
No hay más opciones, todo lo tienen controlado, no existe una tercera figura, ni siquiera una opción distinta y menos lo que rumorean los argentinos pero que no están sistematizados.
La radicalización de la "derecha libertaria" inexorablemente traerá a la izquierda, son los mismos que en términos económicos han aplicado lo siguiente: por izquierda funden al estado nacional y por derecha, lo liquidan.
La tan mentada "guerra cultural", como dijera anteriormente; este gobierno no hará nada, más que aplicar medidas edulcoradas, ya desde las esferas gubernamentales simplemente son declamativas y la izquierda sigue manteniendo lo que dejó estructurado durante todos estos años que estuvieron en el poder.
No sólo preparan la política a su medida, sino que esos mismos sectores de poder, los que manejan la Argentina realmente, ahora incendian la Patagonia, produciendo un verdadero desastre, con muchos argentinos muertos, como consecuencia de maniobras perfectamente planificadas y con la complicidad de sectores radicalizado vinculados a organizaciones que tienen interés en formar un país independiente en la tan vasta y rica geografía de nuestro sur.
Argentina, está viviendo momentos cruciales y si no nos damos cuenta hacia donde nos están llevando, nuestro destino y como lo digo siempre, será trágico.
Para cerrar, debo decir: que los verdaderos sectores de poder, ya no tienen ideologías, sino intereses y manipulan a las masas para imponer sus intereses.